China es el mayor productor de seda del mundo. La gran mayoría de la seda china procede de los gusanos de seda de la morera (Bombyx mori). Durante la fase larvaria de su ciclo vital, los insectos se alimentan de las hojas de las moreras. La producción de capullos de gusanos de seda que no son de morera en China se centra principalmente en la seda silvestre de la polilla china Tussah (Antheraea spp.). Esta polilla se alimenta normalmente de árboles (por ejemplo, robles) y sus larvas hilan un filamento más grueso, plano y amarillento que las polillas de la seda de la morera.[1]
En 2005, China representaba el 74% de la producción mundial de seda cruda y el 90% del mercado mundial de exportación.[2]